Cómo educar en la infancia para acertar en la adolescencia

La psicóloga María Martín Vivar de la Clínica del Dr. Carlos Chiclana, explica Cómo educar en la infancia para acertar en la adolescencia en cinco pautas, haciendo hincapié en la importancia de que padres y madres seamos ejemplo para nuestros hijos e hijas, siendo su marco de referencia y aportándoles seguridad.

1) Forjar una voz interior positiva

¿Cómo miro a mi hijo? ¿Qué le digo? Tenemos que saber que la voz interior que le acompañará toda la vida se configurará con lo que nosotros le decimos. Detectar e intentar nombrar todos los días sus aspectos positivos, fortalezas y actuaciones, que refuercen esta narrativa interior positiva.

2) Conocer nuestro estilo educativo familiar

Conocer nuestro estilo educativo nos ayudará a conocernos mejor, para educarles mejor. Es preferible que tanto la madre como el padre sigan el mismo estilo para que no haya incoherencias en su educación.

Cuatro estilos educativos y sus características

1. Estilo educativo autoritario: los padres son muy exigentes y poco receptivos.
2. Estilo democrático - responsable: los padres son exigentes a la vez que receptivos.
3. Estilo indiferente - negligente: los padres son poco exigentes y poco receptivos.
4. Estilo permisivo - sobreprotector: los padres son poco exigentes y demasiado receptivos.

3) Capacidad, valor e integración: tres objetivos a conseguir

¿Cómo educar en la infancia? Como padres debemos tratar de que consigan estos tres objetivos.

1. Se sientan capaces: con un norte claro, conocimiento personal, sabiendo identificar las dificultades y asumiendo retos.
2. Se sientan valiosos: con miradas de cariño, motivándoles, confiando en ellos, enseñándoles y reforzándoles sus conductas.
3. Se reconozcan e integren: integren lo aprendido en los dos pasos previos, y así crezcan de forma estable y serena, elegantemente y con paso firme.

4) Reforzar su autoestima

Confiar en nuestros hijos e hijas resulta clave para que consigan un correcto desarrollo de su autoestima. Observar y proponerles logros y retos asumibles conforme a sus características y edades, señalándoles la habilidad que ponen en marcha más allá de lo conseguido.

5) Conocer mis reacciones para mejorarlas

1. Dar serenidad: comunicándonos asertivamente, prestando atención de manera consciente y no juzgándoles.
2. Validar las emociones: identificándolas, reconociéndolas y reforzándolas.
3. Mostrar coherencia: no perder de vista que somos un ejemplo para ellos. Comprender, empatizar y mentalizar. Favorecer su autonomía, sin imponer y creando escenarios que creen oportunidades.

Para contactar con María Martín puedes escribirle a su e-mail en mariamartin@doctorcarloschiclana.com