¿Sabéis cuál es el verdadero secreto de Orvalle?
En Orvalle la figura geométrica preferida es el triángulo. ¿Sabéis por qué? Un valor único de este Colegio es que los primeros son siempre los padres. ¿Y sabéis otra cosa? Las siguientes son las profesoras. ¿Y los alumnos? Pues eso: están en tercer lugar. Pero el secreto es que tanto padres como profesoras nos coordinamos para descubrir, pulir y potenciar los talentos que poseen nuestros alumnos.
No estamos aquí para formar sólo ingenieros, arquitectos, médicos. Ni siquiera humanistas, filósofos o poetas. Sí, amamos todas las profesiones, y queremos mujeres creativas, educadas, valientes y ordenadas, entre otras virtudes. Excelentes en su profesión. Por encima de todo, queremos que cada niña sea…feliz. En el Colegio Orvalle, desde hace más de 40 años, tenemos una gran ayuda para conseguirlo: la preceptuación.
La preceptuación es el resultado del cariño, la profesionalidad y la dedicación de padres y profesoras. Así, cada alumno recibe un cuidado único y personalizado desde el aula de dos años. El auténtico reto de la preceptuación es lograr que la sugerencia inspire, interpele y se acoja libremente. Ayudar a nuestros alumnos a descubrir por ellos mismos lo que es bueno, bello y pueda hacerles realmente felices. En Orvalle queremos que los padres toméis conciencia del verdadero valor de la preceptuación, sello distintivo del Colegio, y que lo aprovechéis lo mejor posible. Por ello, os invitamos a ver el siguiente vídeo en el que se manifiesta que la preceptuación es ese enlace fundamental del triángulo, cuyo elemento esencial es la libertad.